Por Miguel Hernández 
El Ayuntamiento de La Pobla de Farnals ha puesto en marcha un proceso de modificación del plan urbanístico con el fin de dar una segunda vida a uno de los restaurantes más emblemáticos de la comarca, conocido en su época por acoger numerosas bodas y eventos sociales, pero cerrado desde hace años.
El alcalde de La Pobla de Farnals, Enric Palanca, explicó que esta modificación es fundamental para permitir nuevos usos en el edificio, actualmente limitado a su función de restaurante por el ordenamiento urbanístico vigente. “Para que este edificio icónico del polígono industrial pueda acoger algo más que un restaurante, necesitamos adaptar la normativa”, señaló Palanca.
Entre las opciones planteadas, el alcalde destacó la posibilidad de convertir el espacio en una residencia para la tercera edad, “aunque hoy por hoy el ordenamiento no lo permite”, apuntó. Si bien no se ha definido el destino final del edificio, Palanca subrayó la importancia de facilitar inversiones y opciones que aporten valor social a la localidad. “Abrir la puerta a una posible residencia o a otros usos es necesario para que el municipio aproveche su potencial y atienda las necesidades de sus vecinos”, añadió.
El alcalde también precisó que, aunque una residencia privada no sería viable para gran parte de la población, este cambio urbanístico es un paso inicial que permitiría en el futuro diseñar una solución que integre un modelo de residencia pública. “No podemos empezar la casa por el tejado; primero necesitamos la posibilidad de convertir estos espacios en opciones útiles para la comunidad,” concluyó.